Receta para robarle el corazón al Dr. Farel

Capítulo 60

Evrie estaba segura de que habia tenido alucinaciones al escuchar la voz de aquel hombre. Queria decir algo, abrir la boca y hablar.

Pero todo se volvié oscuro a su alrededor, y perdié el conocimiento.

Cuando Evrie despertd, habia un alboroto ensordecedor a su alrededor. Miré y se encontré acostada en el sofa del salon. Varios policias la rodeaban. Abrié los ojos y vio manchas de sangre seca en su brazo.

Al ver que habia despertado, uno de los policias le pregunt6: —Sefiorita, gesta bien? Alguien llamé a la policia diciendo que aqui hubo un asesinato, usted debe ser la involucrada, verdad? Acompafienos a la estacién para tomar su declaracioén. —

Apenas termino de hablar el policia, se oy6 la voz ronca y furiosa de Marcela desde afuera.

—jQué tanto se meten si solo le pego a mi hija adulta! gAcaso no puedo educar a mi propia chica como me da la gana? jEsta mocosa se atrevid a llamar a la policia, voy a matarla! —

El patio estaba revuelto, con un ruido incesante. Curiosos se habian congregado alrededor para ver qué pasaba.

Apenas Evrie salié de la casa con los policias, Marcela la vio, sus ojos se inyectaron en sangre como si fueran a estallar, y levanto la mano para abalanzarse sobre ella.

—jEvrie, tu zorra! ¢Te atreves a llamar a la policia? j Voy a acabarte! — —jDetente, no te muevas, no la golpees! — gritaron los policias tratando de detenerla, pero no sirvid de nada. Marcela, bloqueada firmemente por varios policias, miré a Evrie con locura y de repente se echo a reir.

—jEvrie, bien hecho! ,Llamas a la policia para que arresten a tu madre, eh? Quieres verme muerta, verdad? jPues espera y veras, te arrepentiras por el resto de tu vida! —

Dicho esto, se gird y corrié hacia el cobertizo, agarrando una botella de pesticida y bebiendo el contenido con grandes tragos. El liquido verde se derramaba por las comisuras de sus labios, desprendiendo un hedor asfixiante.

— Se esta tomando el veneno? —

— Dios mio, eso es veneno mortal! —

Evrie abrié los ojos de par en par, incrédula, y grito: —|Mama! —

La gente del pueblo se conmocion6 y se apresur6 a quitarle la botella de pesticida a Marcela, pero ya habia tragado varios sorbos, y ahora miraba a Evrie con los ojos enrojecidos.

— Dices que soy una asesina? jPues ahora te lo voy a demostrar! —

No se sabia de dénde saco un cuchillo y se lo paso por las mufiecas...

La sangre comenzé a fluir de inmediato, cayendo al suelo con un sonido sordo. Evrie se quedo petrificada en su lugar.

jEsta loca!

jUna loca que no le importaba su vida!This content © 2024 NôvelDrama.Org.

La escena se volvié cadtica en segundos, y Marcela, con un ruido sordo, soltd el cuchillo y cayé al suelo espumosa y convulsionando.

—jRapido, llévenla al hospital para emergencias! —

Alguien grit alguno.

, y Evrie volvid en si, empujando a la gente a su paso, solo para ver a Marcela con la cara palida y sin movimiento

Su cabeza estaba zumbando.copy right hot novel pub

Llevaron a Marcela al hospital del pueblo, donde le hicieron un lavado de estomago y le curaron las heridas. Evrie se sent6 fuera de la sala de emergencias, palida como un fantasma.

Sabia que Marcela siempre habia sido impredecible, pero nunca imagin6 que llegaria tan lejos, hasta el punto de arriesgar su propia vida.

Oscar, que también estaba en shock, se sento a su lado. De repente, con una voz siniestra, comento:

—Evrie, primero incapacitaste a papa, y ahora vas a matar a mama, estas contenta ahora? —

Evrie lo miré con incredulidad. —z Qué quieres decir con eso? —

—Si solo hubieras escuchado a nuestra madre, gcrees que estaria asi? Solo te agarro del pelo y te golped contra el armario un par de veces, gy por eso llamas a la policia? Si ella muere aqui, seras una homicida por el resto de tu vida. —

Al ver su rostro indiferente, Evrie sintié un escalofrio.

Parecia que las personas acostumbradas a ser golpeadas no podian resistirse ni una sola vez sin ser condenadas. Inflexibles.

Inexcusables.

Ella apret6 sus manos con tal fuerza que sus dedos temblaban como si no fueran suyos.

El teléfono comenzé a vibrar, y al ver el nombre en la pantalla, su respiracién se calmé por alguna razon inexplicable. Agarr6 el celular como si fuera su Ultimo salvavidas.

Evrie se levanté y se escondié en el oscuro pasillo para contestar la llamada.

—gHola...? —

—Todavia puedes contestar el teléfono, veo que no estas muerta —, una voz fria y calmada vino desde el otro lado, con la misma tranquilidad de siempre.

El coraz6n de Evrie se apretuj6, y sus dedos se cerraron con mas fuerza alrededor del celular.

—Dr. Farel —dijo ella, su voz temblaba de una manera que no podia controlar—. No puedo mas.